Un peatón que para a echar una mano cuando se te estropea el coche, un compañero de trabajo que te cede su plaza de garaje durante sus vacaciones, un amigo que envía tu currículum a sus contactos para ayudarte a encontrar un empleo... Además, de forma desinteresada y por iniciativa propia. Son pequeños grandes gestos que dicen mucho de la calidad humana del que los ofrece y
comunican con apenas unas pocas palabras. En muchas ocasiones,
también emocionan.
Efectivamente, como decía Woody Allen, "las cosas no se dicen, se hace, porque al hacerlas se dicen solas." La comunicación es un todo, incluida la parte verbal y no verbal pero, por supuesto, el ejemplo. Cada uno de estos grandes detalles
transmiten una buena dosis de
empatía, escucha activa y generosidad, elementos fundamentales para lograr una buena comunicación.
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